martes, 24 de febrero de 2015

La Luz en tu corazón no engaña...

Déjate iluminar aunque la luz exterior no parezca dispersar las tinieblas... No temas y sigue tu camino con valor... La vocación contemplativa quizá requiera un coraje nuevo, ahora mismo cuando sufre el desprecio o la ignorancia de tantos...
Los valores no dependen de los aplausos o de las aprobaciones ruidosas: esas que siempre "dejan bien." Si quedas en soledad, si nadie quiere "entender" ¡no importa!
Aquí estamos en esta soledad dichosa cuyo resplandor no conoce fronteras y cuyo silencio único penetra hasta las entrañas...

Alberto E. Justo