¡¡No te asombre que aún se escuche!! Los ecos perduran, a veces, muy a pesar nuestro. Pero en una dimensión mucho más alta descubro lo que no puedo imaginar,,,
¡¡Señor, yo te busco hoy y siempre...!! Pregunto y me pregunto... Eso que sé o adivino en la "noche oscura" en horas de incertidumbre... ¡Señor ¿dónde te has escondido?!!
-¿No acabas de comprender que "demasiado" cerca tienes la clave de un secreto incomparable?
Porque la luz del secreto no se apaga jamás...
Alberto E. Justo