¡Qué admirable participar, en modo inefable, en los pasos, vida y misión del Señor! Buscamos fuera y todo lo tenemos dentro. Pero hay un "secreto" de vida que no podemos definir, ni explicar. ¡Un secreto inmenso! "Hágase en Mí, según tu Palabra" en suma lo sabemos: hágase, cúmplase, ¡haz Tú, Señor!
Imposible hablar de los "caminos" en el Corazón de Dios. ¿Hay caminos? Es Él mismo: Camino, Verdad y Vida.
Alberto E. Justo