El silencio de quien calla es lección segura para el silente. No tanto para los que van por ahí sino para los que vamos por aquí.
De golpe nos hallamos en angustia y sin respuestas. No hay más que callar con respeto. Ora, pues sin artificios ni "beaterías" Escucha con atención el susurro de la gracia...
Alberto E. Justo